La convulsa temporada 2020 toca a su fin con la disputa de la última prueba del UCI Women’s WorldTour, la evolución de una Madrid Challenge que abandona en esta campaña los confines de la Comunidad para adentrarse en Castilla – La Mancha, donde cubrirá la primera de sus -otra novedad- tres etapas.
Será un trazado para velocistas y rodadoras potentes el de la prueba española, con una primera fracción jalonada con multitud de suaves repechos -el más incómodo, camino de Erustes, con unos 3 km al 4%- y, sobre todo, con una dura rampa del 7% en la llegada a Escalona (83 km, viernes 6).
Las otras dos etapas son de sobra conocidas: una veloz CRI de 9 km en Boadilla del Monte (sábado 7) y las 17 vueltas al capitalino circuito de Prado, Recoletos, Gran Vía y Cibeles (100 km, domingo 8).